Una piscina de bordes infinitos en Singapur
¿Te imaginas estar en un edificio a 200 metros sobre el nivel mar, zambullirte en una piscina y aún así sentir como si estuvieras nadando en una bahía natural?
Pues no sólo puedes imaginarlo, también puedes experimentarlo visitando el Hotel Marina Bay Sands de Singapur, que cuenta con una increíble piscina de borde infinito y además tiene la particularidad de ser el más caro de todo el mundo.
Los huéspedes del hotel son los únicos que pueden ingresar a la piscina. El horario es extenso,:de 6 am a 11 pm. Gracias a ello pueden elegir pasar el día a puro sol o bien disfrutar del atardecer y ver caer la noche, ambos momentos ofrecen postales que no se olvidan jamás. Para que la jornada sea absolutamente confortable, hay una tienda abierta desde las 7 am hasta el cierre donde se puede comprar snacks livianos y bebidas con y sin alcohol.
La piscina forma parte del parque al aire libre “Skypark Arenas” que funciona en el último piso del Hotel Marina Bay Sands. Lo que la vuelve un atractivo en sí mismo es su borde infinito. Esta cualidad significa que el contorno se borra visualmente, permitiendo que se pueda ver más allá de la línea del horizonte, dando a quienes nadan en ella una sensación única de continuidad que hace pensar que se está nadando en la bahía misma.
Ubicada en el piso 55, la infiniti pool se extiende por 150 metros (tres veces lo que una olímpica). Si te preguntas cómo consigue el efecto de infinitud, la clave está en que el agua cae por el borde de la piscina hacia un canal que la recoge y la vuelve a bombear hacia ella. Por si su originalidad no fuera ya algo superlativo, hay que añadir que el edificio donde está tiene forma de mazo de cartas y que construir todo el complejo costó alrededor de 5.000 millones de euros.
Si bien poder acceder a la piscina implica desembolsar el precio de una suite (425 euros, aunque varía según la temporada), el ingreso al Skypark Arenas es abierto al público general. Así que se puede recorrer el lugar aún sin ser huésped del hotel. De esta forma, podrás ver de cerca a piscina, visitar el restaurante, concurrir a la discoteca o bien disfrutar del mirador con vistas de 360 grados.
Este hotel no deja tampoco de sorprender puesto que, en el centro comercial del Marina Bay Sands, se encuentra un canal interior a través del cual se ven pasar barcos Sampán, fabricados de acuerdo al estilo de las tradicionales embarcaciones chinas del siglo XVII. No hay que olvidar que aquí funciona uno de los casinos más importantes de la ciudad, una plaza al aire libre, dos teatros y un pabellón de cristal en forma de flor de loto, que corresponde al Museo de Arte y Ciencia del hotel.
Si, realmente es increíble. Una cosa de locos.
Yo cuando ví las imágenes no lo podía creer…
Ale: te aseguro que me impresiona, no hubo ningún accidente allí? pero fuera de broma qué espectáculo, que suerte tiene la gente que puede conocer estas maravillas!!!!!!.